La vida puede cambiar en cuestión de segundos según el destino que escojas. Pero cada una de las decisiones que se toman, son imprescindibles de cara al futuro. Para Carlo Ancelotti, fue fundamental escoger en el momento idóneo.
El Real Madrid está en su décimo séptima final de Champions y seguramente esto tampoco sea una casualidad. Para el italiano será la quinta final que dispute en toda su trayectoria: tres las disputó con el Milán y dos con el Real Madrid. Ha ganado cuatro de ellas y tan solo se le ha resistido una.
Seguramente, la constancia y la paciencia para alzarse una y otra vez campeón, la cogió de su casa. Carletto venía del seno de una familia de campesinos. La vida en el campo, no te asegura grandes riquezas, solo si te dignas a preparar una buena cosecha y poder manejar bien todas tus posesiones. La familia Ancelotti se dedicaba al queso y así lo hizo toda su vida.
El queso y el fútbol: grandes comparaciones en la vida de Ancelotti
Para ello debes armarte de valor y conocer bien la tierra. Un claro símil con el fútbol. Temporada a temporada, un equipo debe contar con una gran planificación deportiva a la altura de las circunstancias para conseguir nuevos títulos y logros. El entrenador debe conocer a las mil maravillas a la plantilla y a cada jugador, como el campesino debe cuidar y curar sus quesos.
El parmigiano es un lácteo que desprende mucho olor. Su cuidado debe ser excelso para conseguir ese punto granulado para utilizarlo en diversas comidas. De conseguirlo, ese queso estará bien curado.
Lo mismo sucede con el rendimiento de un jugador. Si el futbolista consigue armar una buena temporada, habrá sido, debido a su titánico esfuerzo en cada uno de los entrenamientos.
Ancelotti, el símbolo de la constancia
Carlo Ancelotti, podría coger muchos símiles de su infancia. El italiano procedía de una familia del corazón de Parma, en Reggiolo. Allí, en la inmensidad de tanto verde, vio el posible éxito que podía conseguir en un campo de fútbol.
En la cuna del fútbol italiano, con grandes nombres que han pasado a lo largo de la historia, se formó Carletto.
Pasaba numerosas horas practicando este deporte y se dedicaba a él cerca de las ocho u nueve horas al día. Era una de sus auténticas pasiones y en su adolescencia tuvo que tomar una de las decisiones más importantes de su vida. ¿Dedicarse al mundo rural o triunfar como futbolista y técnico?
El técnico, es uno de los hombres más laureados en el panorama futbolístico y tiene el respeto y el mérito de aficionados y entrenadores rivales. Con su larga carrera, ha podido demostrar sus nociones de este futbolista que creció rodeado de verde y queso hace muchos años.