En Europa, los jugadores reconocen la grandeza de Vinicius Junior y no tienen problema alguno en reconocerlo y evidenciarlo. Prueba de ello, es que tras perder frente al Manchester City en la noche más dura que ha vivido como madridista, se dio un gran abrazo con Bernanrdo Silva.
El jugador carioca intercambió palabras con el lusitano durante un rato y se llevó su camiseta. Además, quedó en darle la suya a Erling Haaland, con quien ya vimos en la ida que se lleva francamente bien.
Por este motivo, sale a relucir la campaña de desprestigio y persecución que sufre el "20" de Carlo Ancelotti en el fútbol español. Cuando sale a jugar partidos de mayor envergadura y contra rivales de clase mundial la cosa cambia por completo y le reconocen el talento.
No estuvo a la altura
Lo cierto es que en la noche de hoy el ex del Flamengo no estuvo para nada correcto. Desacertado, impreciso y sin generar peligro contra la portería de los pupilos de Pep Guardiola. En definitiva, en la línea de todo el equipo.
Afortunadamente, tan solo tiene 22 años y dispone de una carrera por delante para escribir historia en el equipo más grande de toda la historia.