La ventana del mercado de fichajes, en ocasiones, sorprende con incorporaciones inesperadas. La llegada de Mahamadou Diarra al Real Madrid fue de largo, una sorpresa para muchos. Petición expresa del técnico Fabio Capello, se quería dar prioridad a reforzar el medio del campo tras el vacío que había dejado Makélélé y que nadie había conseguido solventar.
¿Qué fue de Mahamadou Diarra?
En la temporada 2010/11 el jugador de Bamako, lugar de nacimiento del futbolista, emprendía una vida lejos de Concha Espina. Su periplo en el Real Madrid había terminado y el pivote emprendía una vida nueva. No tuvo mucho más recorrido lejos de la casa blanca.
Desde su adiós al Bernabéu, jugó únicamente cuatro temporadas más en activo para retirarse en 2014. Tras el Real Madrid, pasó por El Principado, para jugar en el Mónaco, a cambio de 1,5 millones de euros.
Una experiencia algo extraña, ya que no disfrutó de los minutos acordados. En su única temporada tan solo jugó nueve partidos. Tras aquel año, se fue rumbo a la Premier League.
El final de su carrera lo disfrutó en Inglaterra, en Fulham. Allí jugó sus tres últimos años de futbol en una posición algo más discreta y relajada. Desde su adiós, se ha mantenido siempre alejado de los focos siempre que ha podido.
De la élite a la cárcel
Pero la vida de un futbolista, nunca pasa desapercibida. El caso del jugador fue del todo curioso. En 2016 fue condenado por fraude fiscal a dos años de prisión y pagar una multa de 10 millones de francos en su país.
Según la investigación, todo ocurrió debido a la compra de un terreno en su ciudad natal. La afectada, no recibió el dinero y lo denunció a las autoridades. Mahamadou se vio obligado a devolver el fraude que cometió, que rondaba los 22 millones de francos -cerca de los 21 millones de euros-.
Fue a finales de abril, cuando el ex madridista fue condenado a dos años de prisión y a pagar una multad de 10 millones de francos. La condena se la impuso un tribunal de su país, por un caso de fraude en la venta de una parcela. En la actualidad poco más se conoce de él.
Su paso por el Real Madrid
Llegó en la temporada 2006/07 bajo el mandato de Ramón Calderón. Su paso por el equipo se resume en cuatro temporadas y media. El conjunto de Concha Espina invirtió cerca de los 26 millones de euros en su fichaje.
Su fútbol de garra y entrega sorprendió a más de uno, para acabar convirtiéndose en una pieza clave en el mediocentro. Era un futbolista rocoso, que iba siempre al choque y con el temple para sustentar al equipo.
El futbolista era un jugador supersticioso y siempre jugaba con una muñequera con los colores de la bandera de su país: verde, amarillo y rojo.
Con un gran cartel procedente de Lyon, venía con la voluntad de convertir los deseos de Capello para achicar aguas. Su trayectoria en Lyon era reconocida por el temible mediocampo que formaba con Juninho y Michael Essien, otro exmadridista. Los grandes jugadores siempre acaban jugando para los mejores equipos.
Curiosidades sobre Mahamadou Diarra
Mahamadou, musulmán practicante, también tuvo varios capítulos destacados con los servicios médicos del club. Los dietistas se encargaban de cuidar muy bien de la dieta del jugador. Durante un tiempo, fue el único jugador de la plantilla que practicaba su religión y como practicante seguía los ritos del “ramadán”.
El ayuno de comidas y bebidas y abstención de relaciones sexuales durante treinta días. Para el club era muy importante que el jugador estuviera en condiciones óptimas, al considerarse una pieza clave en el esquema blanco.
Pero en el club todavía se le recuerda por su gol decisivo en la liga de las remontadas. En su primer año como madridista. Su tanto de penalti en el último partido de La Liga 2006/07 le dio al Real Madrid el título de campeón.
Su gol certificó la remontada merengue para alzarse con la competición doméstica. En una temporada que el club de Chamartín le recortó 6 puntos a falta de 13 jornadas al Sevilla. Hasta que, en la penúltima jornada, se diera el Tamudazo y el FC Barcelona y el Real Madrid desempataran a puntos.
Se convirtió el único futbolista africano que consiguió ganar 6 ligas consecutivas en Europa. En Francia, conquistó 4 títulos domésticos por los dos más que celebró con el Real Madrid. Una senda de triunfos imparables desde 2003 hasta el 2008. En su palmarés, además de las ligas, tiene tres supercopas de Francia y una Supercopa de España.
Desenlace de blanco para el mediocentro
A pesar de convertirse en el tercer capitán de la plantilla blanca, el jugador malí, fue perdiendo protagonismo en el grupo.
Diarra, tercer capitán de la plantilla madridista, jugó un total de 87 partidos con la camiseta del Real Madrid, siendo la primera campaña la más destacada. Un jugador que fue de más a menos con su rendimiento sobre el verde.
Pérdida de protagonismo
Con Capello y Bernd Schuster es un asiduo en los onces del Bernabéu, pero la llegada de sabia nueva al banquillo, le recolocaron en el banquillo. Las lesiones no le respetaron lo suficiente. En 2008 sufrió una grave lesión de rodilla, que le tuvo apartado hasta 9 meses fuera de los terrenos de juego.
Para suplirle, el Real Madrid fichó a un francés de origen maliense y de mismo apellido que Mahamadou: Lass Diarra.
Su participación pasa por jugar partidos menos trascendentales y esto le repercute en su rendimiento. Con la llegada de Manuel Pellegrini, el ingeniero, le da los mandos a otro jugador con mayor técnica, como Xabi Alonso. Junto con Lass y Granero, Mahamadou, pierde su sitio.
Con la llegada de Mourinho, los pocos minutos que le ofrecen al pivote y la necesidad de incorporar a otros perfiles extracomunitarios, el futbolista toma la decisión de salir.
Adebayor, motivo de recambio
La llegada de Adebayor obligaba al Madrid a prescindir de una de sus fichas y el elegido fue el centrocampista de Mali, que terminaba contrato a final de temporada. Todas las partes veían bien la opción pretendida.
De esta forma, el centrocampista de 29 años, ponía fin a su etapa en el Real Madrid en busca de un futuro con más minutos.