La nueva temporada de algunos jugadores blancos ha empezado a rodar de nuevo. Es el caso de Marcelo, quién ha sido el que más tardío ha hecho su debut. El madridista con más títulos en la historia del club, cambió de aires este mismo verano tras que la entidad no le renovara su contrato.
El jugador se debatió entre la retirada, nuevos roles en el fútbol o seguir disfrutando de él como jugador. Finalmente su decisión algo más meditada que el resto de compañeros que salieron, decantó por ser la que todos esperábamos. Su magia a pesar de no ofrecer su mejor versión parece que se ha apagado todavía.
A día de hoy milita en el Oympiakos griego, uno de los mejores equipos del país heleno. El fútbol ha querido que su carrera continuara allí con otros madridistas. En el verde comparte vestuario con James Rodríguez. El cafetero vivió unos años algo irregulares como merengue, pero tuvo sus momentos de gloria. Como entrenador tiene a Míchel González, una leyenda blanca de todos los tiempos. Este quizá ha sido uno de sus grandes valedores y quién trata ahora, de volver a exprimir al jugador con su mejor versión.
La reconstrucción del mejor Marcelo en manos de un madridista
Por ello, se ha puesto manos a la obra y ya nos ha dejado un primer síntoma de lo que busca. Vistas las flaquezas que ya se detectaron en sus últimos meses como jugador blanco, el ex centrocampista ha decidido colocarle en una posición más adelantada por la misma banda: la de interior izquierdo. De este modo, puede sacar su máximo rendimiento en ataque.
Una facultad con la que siempre se ha desarrollado bien: tiene buen golpeo, buena visión de juego, pone buenos centros...En definitiva, puede cumplir muy bien las expectativas. Además cabe recordar que no es la primera vez que juega en esa zona. Con el Real Madrid, equipo con el que sumó cerca de 546 partidos como profesional, disputó 35 de ellos en esa demarcación.
Cuando jugó allí lo hizo bien y hasta consiguió aportar al equipo con siete goles y seis asistencias. El experimento consiguió ser bastante positivo. Tan solo perdieron en nueve ocasiones y empataron en cinco. Números satisfactorios para el jugador.
Los primeros minutos de Marcelo con Olympiakos
Por ahora, acumula tres encuentros en los que ha jugado 70 minutos entre todos ellos. Los mejores, la media hora de ayer en el partido de Europa Legue ante el Qarabag. El partido no pudo pasar del empate, pero ya se le vieron cosas al brasileño. La situación en su grupo de Europa League es complicada. En cuatro partidos tan solo han conseguido sacar un empate con tres derrotas.
Tienen un único punto a falta de dos jornadas. Su rival más cercano, el Nantes francés, está a dos puntos. De ganarles en el próximo duelo y el otro restante podrían tener opciones de clasificarse para la Conference.
Veremos qué ocurre entonces y si Míchel confía en las armas del madridista para sacar el partido adelante. La siguiente prueba que tiene el ahora interior es el próximo lunes ante el PAOK de Atenas en Liga. Veremos si también tiene minutos allí. La afición griega está muy ilusionada con su fichaje y esperan grandes cosas de él.