El Olympiacos de Marcelo y James Rodríguez ganó ayer en su visita al estadio del OFI Creta (1-2) y consiguió su segunda victoria consecutiva en la Liga de Grecia. Un triunfo que sirve para que los de Míchel González se coloquen a cuatro puntos del líder, el Panathinaikos, pero con un partido menos. De este modo, el conjunto griego se rehízo del duro varapalo que se llevó el pasado jueves de la Europa League, al caer derrotados por 0-3 contra el Qarabag.
El Olympiacos es colista su grupo de la Europa League, en el que se encuentran el Friburgo, el Qarabag y el Nantes. Han perdido los tres partidos que se han disputado y tienen muy complicado el pasar a las rondas eliminatorias, por lo que parece que su objetivo podría estar el alcanzar el tercer puesto, que le daría la clasificación a los dieciseisavos de final de la Conference League.
Fue en el estadio Theodoros Vardinogiannis de Heraklion la segunda victoria consecutiva de los de Míchel, que debutó el pasado fin de semana y ganó al Atromitos (2-0). Esta vez se impuso como visitante en un choque que se puso cuesta arriba al borde del descanso con un autogol del centrocampista Andreas Ntoi.
James falló un penalti y Marcelo apenas tuvo minutos
El Olympiacos afrontó su compromiso de la séptima jornada con James Rodríguez y el brasileño Marcelo en el banquillo para acentuar la persecución al Panathinaikos, con cuatro puntos de ventaja antes de recibir al Asteras. Míchel, que vio cómo el choque se había complicado bastante, recurrió en el descanso a James, que sustituyó a Georgios Masouras, y al caboverdiano Garry Rodrigues, que ocupó el lugar de Ntoi. La jugada le resultó redonda al técnico madrileño ya que todo cambió en la segunda parte.
La entrada de James en el conjunto ateniense no tuvo un buen arranque. El colombiano ejecutó un penalti en el minuto 52 que detuvo el meta Christos Mandas. Pero seis minutos después fue decisivo. Asistió a la perfección a Garry Rodrigues, que encaró solo al guardameta rival y puso el empate en el marcador.
Fue en el tramo final del partido cuando el Olympiacos dio la vuelta a la situación con el tanto del congoleño Cédric Bakambu tras recibir un balón de Mathieu Valbuena. Y a diez minutos del final, Marcelo entró en el terreno de juego para sustituir al centrocampista Camara y reforzar la defensa para segurar el triunfo.