Nacho Fernández lleva toda su carrera deportiva vistiendo los mismos colores, los del Real Madrid. Es un jugador de perfil bajo al que le gustan poco las extravagancias de ahí que no suela aparecer en las primeras planas de los medios de comunicación, sin embargo cosa diferente ocurre cuando el campeonato liguero lo cruza con el Sevilla, entonces hasta los diarios de la capital andaluza maldicen al madrileño.
Y es que a pesar de que no es uno de sus fuertes, el Sevilla es la víctima preferida de Nacho Fernández. A los andaluces le ha metido tres goles a lo largo de su trayectoria con el Real Madrid y con motivo de un nuevo enfrentamiento entre ambos seguro que los hispalenses encenderán las alertas para tener atado al central merengue. Aunque tampoco es que Carlo Ancelotti le esté dando mucha comba esta temporada.
Pese a que cuando sale no solo cumple sino que es una garantía, el madrileño no acaba de ganar las credenciales para que sea considerado como central top. Y es que si bien ha estado tanto años en el Real Madrid compitiendo por un puesto con los mejores del mundo, no le ha valido para ganarse la titularidad de forma indiscutible. Es cierto que el defensa blanco puede no estar al nivel de Alaba o de Militao, pero no se le recuerda un error.
Además, Nacho se destaca por ser un jugador de club pues su experiencia ha sido solo la de estar vestido siempre de blanco. No parece que quiera salir del Real Madrid para disfrutar de más minutos con otros equipos. Es uno de los capitanes y eso le hace sentir importante, todo un ejemplo para los canteranos y los jugadores más jóvenes que llegan al Real Madrid y que sueñan con triunfar en el primer equipo.
No hay que olvidar que Nacho Fernández pertenece al actual elenco de jugadores merengues que han logrado cinco Copas de Europa y pese a que no haya sido clave sí que ha sido muy importante para sostener al equipo. Y es que lo bueno que tiene este futbolista es que cada vez que se le necesita sale al campo no solo a cumplir sino a destacar en facetas defensivas, algo que habla muy bien de su rol.
Un rol que por otra parte siempre ha aceptado pese a las opiniones de periodistas o rivales sobre su calidad. Está más que comprobado que Nacho es de esos tipos en peligro de extinción en el planeta fútbol. Ahora es casi imposible que un futbolista empiece y acabe su carrera en el mismo club, pero parece que Nacho quiere conseguirlo y a sus 32 años es más que probable.