Antonio Rüdiger tuvo que bailar con la más fea, Erling Haaland. El defensor alemán fue titular después de que Eder Militao no pudiera estar sobre el césped por estar sancionado. Sin embargo, nadie se acordó del brasileño.
El germano hizo el mejor partido de la temporada. Bien es cierto que sus actuaciones a lo largo de la campaña generaban dudas a la parroquia merengue, pero en el día clave estuvo a la altura de las circunstancias. Desativó por completo al ariete noruego de los skyblues.
Fue tanto su poderío, que llegó a desesperar a Pep Guardiola. El entrenador del Manchester City estalló tras una entrada del zaguero local. Le dijo, como en modo de protesta, que estaba muy fuerte. La respueta de Rüdiger no pudo ser más clara: "me lo dices fuera".
Un lujo para Ancelotti
Toda la parroquia de Chamartín tiene en mente el partido de vuelta en el Etihad. Ese encuentro decidirá el futuro del vigente campeón de Europa en esta edición de Liga de Campeones y tras el primer asalto del Bernabéu solo vale ganar.
Para ese día, Eder Militao ya estará disponible. Por tanto, habrá que ver lo que decide hacer Ancelotti, ya que tampoco hay que olvidarse de David Alaba. Carletto tiene un problema que desearía tener el resto de entrenadores.