El fichaje de David Alaba por el Real Madrid ha sido una de las mayores gangas de los últimos años. El austriaco aterrizó el año pasado en la capital de España a coste cero, ya que terminaba contrato con el Bayern de Munich. Llegaba al Santiago Bernabéu como uno de los mejores defensas del mundo y que había ganado 28 títulos en once años defendiendo los colores del conjunto bávaro.
Él y Eder Militao han formado una de las mejores parejas de centrales del planeta, siendo una pieza vital en los éxitos que ha conseguido el equipo este año. Además, se han hecho grandes amigos. A sus 30 años (recién cumplidos), el central ya puede presumir de haber ganado 31 títulos (28 con el Bayern de Munich) al haber conquistado en su primera temporada como madridista la Supercopa de España, la Liga y la Champions, siendo la tercera vez que levanta el trofeo de la máxima competición continental.
La llegada de Antonio Rüdiger al conjunto blanco hará que, seguramente, Alaba vuelva a jugar en el lateral izquierdo (donde se ha desempeñado la mayor parte de su carrera). Esto tendrá como máximo perjudicado a Ferland Mendy, aunque él quiere quedarse y sabe que tendrá muchos minutos ya que la temporada es muy larga.
Los ídolos de Alaba cuando era niño
Justo antes de firmar por el Real Madrid, siendo aún jugador del Bayern de Munich, Alaba se pasó por el canal oficial del seis veces campeón de Europa. En el vídeo, salen varios niños preguntándole al defensa varias cosas que no se sabían de él: cuál había sido su mayor broma en el vestuario del Bayern, qué sintió cuando firmó por el conjunto alemán, su mejor gol como profesional…
Una de las preguntas más destacadas fue de un niño llamado Servus Henningc, que le preguntó quién era su modelo a seguir cuando era un niño, a lo que Alaba contestó lo siguiente: “Tuve varios modelos a seguir o ídolos, como Jay-Jay Okocha, Patrick Vieira, Zinedine Zidane, Ronaldinho. Eran jugadores que me gustaban mucho”.
“Cuando ya llegué al Bayern de Munich me fijé mucho en Zé Roberto, Franck Ribery y Mehmet Scholl. Todos eran jugadores a los que admiraba y de los que intenté aprender muchísimas cosas”, finalizó el austriaco