El Balón de Oro que ganó Benzema este pasado lunes, culmina una temporada de ensueño para los madridistas. Ganador de la Champions y de la Liga, además de ser el máximo anotador en cada una de las competiciones, demostraban tener su propio sello de autoridad para dar un golpe encima de la mesa.
En concreto es el onceavo jugador blanco que consigue este galardón, aunque entre este grupo selecto ha habido un total de 16 premios. Quién posee más es Cristiano Ronaldo con cinco. En los últimos diez años ha habido seis galardones que han acabado en las harcas de Chamartín.
Las características del premio al mejor jugador del año
Aunque más allá de todos estos éxitos, ¿sabías qué precio real tiene este premio? Los jugadores se adquieren una buena carga de dinero y con este tipo de trofeos su cuantía económica es cuanto menos suculenta. El valor de este premio está valorado en 13.000 euros.
Su trabajo es muy laborioso y se tarda casi seis meses y unas 100 horas de manufacturación para fabricarlo. Es uno de los más deseados del mundo, pero su tamaño no desprestigia su grandeza. Tan solo mide 31 centímetros de alto por 23 de ancho.
Para el último detalle se espera hasta la misma edición de la entrega, para estampar el nombre del jugador. La estatuilla es una creación de la casa parisina Mellerio. Esta es una de las más famosas de la capital francesa, que existe desde hace numerosa antigüedad. Sus orígenes son italianos, aunque resulta que abandonaron la zona de la Piamontesa cerca del 1515. La orfebrería tiene tanta tradición que también son los encargados de diseñar el trofeo de Roland Garros.
Los secretos ocultos del Balón de Oro
El trofeo ha sido rediseñado en una sola ocasión desde su existencia. Ocurrió en 2003, en el año que coincidió el cambio de formato de la Liga de Campeones. Se les acusó de posible fraude ya que en el trofeo había dos pequeñas líneas grabadas, que ocasionaron numerosos problemas.
Pero por si no lo sabías, hay más secretos escondidos. Este Balón no es de oro como su propio nombre indica. El material que se utiliza son dos semiesferas de latón, y el último detalle es bañarlo en el material dorado.
Tras esto, se fija el esférico en un pedestal de cristal de pirita. Lo más complicado acontece luego: se llena la bola de cemento en polvo para que el trofeo coja consistencia. Al mismo tiempo es cuando se empiezan a dibujar los detalles y requisitos que faltan para que todo esté listo para que el Teatro de Chatelet de París, reciba a los invitados más prestigiosos.