Cristiano Ronaldo salió del Real Madrid rumbo a la Juventus en el verano de 2018. Entonces el Real Madrid recuperó toda la inversión por la compra venta del futbolista portugués quien nada más proclamarse campeón de la Copa de Europa salió a decir que ese sería el último partido con el equipo con el que ganó 4 Orejonas. Al principio no sentó nada bien, y el Madrid le dio facilidades para que cumpliera sus deseos.
Ahora, visto con perspectiva parece que Florentino y sus asesores más cercanos tomaron la mejor decisión para el Real Madrid pues viendo los problemas que Cristiano está generando en Mánchester no es de extrañar que hubiera pasado lo mismo en la capital de España. Fue el momento justo para efectuar su venta, pues a pesar de que el Madrid pasó dos temporadas difíciles parece que el cambio fue bueno.
Hasta el punto de que si el bicho pensaba que con su salida se acabarían los triunfos del Madrid en el viejo continente, se equivocaba profundamente. El Real Madrid logró el año pasado la Decimocuarta mientras que Cristiano no ha tenido el mismo éxito tras su marcha. Ahora tanto el propio jugador como su entorno saben el error que cometió al salir del Real Madrid, pues como se suele decir, fuera de Chamartín hace mucho frío.
A pesar de todo, Cristiano Ronaldo ha encontrado en el Mundial de Catar sus máximas aspiraciones profesionales en este curso. Con el United no solo no juega sino que parece que está dinamitando un vestuario donde Ten Hag es el líder y él mero atrezo, algo que nunca le había ocurrido en toda su carrera deportiva. El hecho de pretender salir del club en verano para poder haber jugado la Liga de Campeones no ha gustado a nadie en el United.
Ante esta situación, el club inglés tendrá que lidiar con él hasta final de temporada, a no ser que llegue una oferta de alguno de los equipos que están jugando la fase final de la Champions League que se retomará en 2023. El Mundial por tanto es lo único que le asegura al bicho minutos en esta temporada. No parece que en su país pueda atravesar la misma situación que en Mánchester. Este será su último Mundial.
Florentino Pérez fue por tanto capaz de leer un futuro en Cristiano encaminado hacia la decadencia más que al esplendor en el que se había situado, en parte, gracias al Real Madrid. Eso sí, no hay que negar lo evidente, y esa evidencia muestra que el Real Madrid con Cristiano Ronaldo fue capaz de marcar la época más esplendorosa de un club en el llamado fútbol moderno. Pero la actitud de Ronaldo de ahora dista mucho de la que mostró vestido de blanco.