El Real Madrid ha tomado la decisión de blindar a todo su proyecto de presente y futuro renovando los contratos de sus futbolistas más deseados por otros clubes. Lo ha hecho mejorando sus contratos y aumentando la duración de estos, pero también incluyendo una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros.
Según la información de Fabrizio Romano, el club lo ha hecho para evitar que la Premier League o Arabia Saudí realicen grandes operaciones con sus futbolistas. Es cierto que los jugadores están felices en el Madrid y no se plantean salir a ningún otro equipo, pero en el mundo del fútbol nunca se sabe. También influyen mucho sus agentes y familiares, y todo puede cambiar de un momento a otro.
El madridismo puede estar tranquilo, porque Vinícius, Rodrygo, Camavinga, Tchouaméni, Valverde, Militao, Bellingham, Endrick, Güler y Brahim van a estar en el Real Madrid hasta que finalicen su contrato, siempre y cuando al club no le interese antes su salida.
Florentino Pérez confía en que este grupo de jugadores pueden marcar una época en el Real Madrid durante la próxima década. Es una mezcla de calidad con potencia y fuerza física, que les convierten en jugadores ideales para el fútbol moderno.