El partido entre el Valencia y el Real Madrid tuvo absolutamente de todo. Vinicius terminó siendo expulsado, el conjunto blanco consiguió remontar y, además, Mbappé marcó un gol que se lo anularon por fuera de juego. El tanto fue de bella factura, pero no subió al marcador.
Y no lo hizo por apenas milímetros. La realidad es que la posición del galo es muy ajustada, pero en Valdebebas no se terminan de fíar del semiautomático. Prueba de ello es que tardaron hasta siete minutos en mostrar la acción.
Las diferencias con otras competiciones son más que evidentes. De hecho, en otros torneos tardan mucho menos tiempo en sacar la acción en televisión. Esto es solo un ejemplo del porqué el Real Madrid está enfadado con el uso que se la a la tecnología. Ya en Vallecas pasó algo parecido con el penalti, más que evidente, a Vinicius Junior.
Grandes diferencias
Florentino comenta con su círculo más privado las continuas diferencias en el arbitraje en España con el que se ve en la Champions. Esta sensación la llevan teniendo desde hace bastante tiempo y el hartazgo aún continúa. No obstante, a nadie le extraña.
La entidad no deja de mostrar su malestar a través de RMTV. El conjunto blanco utiliza su canal como altavoz para las quejas. A pesar de que a muchos antimadridista no les guste, la institución madridista siempre deja en evidencia al estamento arbitral. No es para menos, puesto que tienen razones y de sobra.
Afortunadamente, el vigente campeón de liga consiguió sacar los tres puntos en la noche de ayer. No obstante, el club estima necesario seguir alzando la voz contra estas injusticia arbitrales, no solo cuando pierde o empata. El enfado está presente en la casa blanca.