El Real Madrid ganó el domingo al Sevilla (4-2) y se ha despedido del fútbol en este 2024. Los jugadores tendrán ahora una semana de vacaciones antes de volver a los entrenamientos y preparar los próximos compromisos.
El primer partido que el Madrid encarará en 2025 es el encuentro aplazado que tiene de Mestalla ante el Valencia, programado en un primer momento para el 2 de noviembre de este mismo año y que se suspendió por los terribles efectos que desató la gota fría por aquel entonces.
Finalmente, Valencia y Real Madrid se verán las caras el 3 de enero, sólo tres días antes de que el conjunto de Carlo Ancelotti debute en la Copa del Rey ante la Deportiva Minera (6 de enero, 19 horas).
El conjunto valencianista no atraviesa por su mejor momento y ha cerrado el año en la 19ª posición de la tabla clasificatoria de Liga, teniendo los mismos puntos (12) que el colista, que es el Valladolid. El club acaba de comunicar el cese de Rubén Baraja, entrenador del equipo.
A puerta cerrada
Según adelanta ‘Estadio Deportivo’, el choque del 3 de enero entre chés y merengues podría jugarse a puerta cerrada debido a que una plataforma valenciana, Libertad VCF, está emplazando a que los aficionados abandonen la grada durante el partido para protestar por la gestión de Peter Lim, máximo accionista del Valencia desde el año 2014.
La iniciativa ya se ha llevado a cabo en dos ocasiones, aunque esta vez, aprovechando el tirón que ofrece el Madrid, podría tener una repercusión mundial única. “No seremos cómplices de quienes están destruyendo nuestro club”, han asegurado desde Libertad VCF.
“La situación del Valencia C.F. ha llegado a un punto crítico y terminal. Peter Lim y sus cómplices en Valencia han llevado a nuestro club a la ruina deportiva, económica y social. Como asociación comprometida con el futuro de nuestro equipo, no podemos mirar hacia otro lado. Es nuestra obligación histórica alzar la voz y actuar”, han manifestado desde esta plataforma ché.