Jesús Navas disputó esta tarde su último partido como profesional. El jugador del Sevilla FC tuvo una despedida a su altura la semana pasada en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán y hoy ha vuelto a ocurrir lo mismo en el Santiago Bernabéu.
El Real Madrid, una vez más, ha estado a la altura de las circunstancias en un acto de este tipo. El propio Navas no ha podido emocionarse y ha estado muy agradecido con la entidad merengue. Lo dejó claro después del choque ante los medios de comunicación: "Nunca olvidaré lo que ha hecho el Santiago Bernabéu. No lo había visto en un estadio rival", resaltó.
De este modo, pone fin a su carrera deportiva de la mejor manera posible. La entidad merengue ha sido consciente de que fue una pieza importantísima para el fútbol español y por ello tenía que tener un homenaje a su altura.
Un Bernabéu ejemplar
Lejos de los detalles que ha tenido el club blanco, también hay que resaltar que el Santiago Bernabéu lo ovacionó en el inicio y, además, cuando salió al terreno de juego. El grito de "Navas, Navas", sonó al unísono y esto no ocurriría en otros estadios.
Por tanto, el Real Madrid ha dejado claro que en este tipo de cosas también es el mejor del mundo y resalta en gran medida el señorío del que tanto se suele presumir. Evidentemente, esto no es habladuría barata, sino que se refleja con hechos como los de hoy.
Este partido ante el Sevilla ha dejado muchos momentos para el recuerdo y será un encuentro que no se va a olvidar en Chamartín. El equipo de Ancelotti va por buen camino y la mejoría respecto al principio de temporada es notoria. El madridismo puede tener unas navidades tranquilas.