Si hay un jugador que suele ser sincero ante los micrófonos de la prensa, ese es Courtois. Para lo bueno y para lo malo nunca se guarda nada. Cuando hay que festejar es el primero, cuando hay que abrirse lo hizo después de su lesión para contar por lo que había pasado, pero también señala los errores del equipo y las cosas que hay que mejorar.
Eso es lo que hizo al acabar el partido ante el Dortmund. En medio de toda la euforia tras la remontada, él no parece estar tan contento con lo que pasó, a pesar del resultado final y así lo hizo ver. Durante la primera parte se le vio cabreado con sus compañeros y aseguró que “nos juegan demasiado fácil cerca del área. Podían controlar, mirar y disparar. Tuvimos que despertar y reaccionar. No siempre va a funcionar”.
Y es que esta vez sí que pudieron darle la vuelta al marcador, pero no pueden regalar una primera parte como lo hicieron ante el Borussia, y mucho menos darles dos goles de ventaja, ya que no es sencillo anotar 3 en solo 45 minutos. Esta vez si salió, pero el portero belga ya tiene la vista puesta en el Clásico, aunque es duda debido a su lesión.
El mensaje de Courtois
Está claro que ante el Barça no se pueden confiar, y Thibaut quiere que la intensidad sea máxima desde el principio, por eso remarcó que “tenemos que empezar el sábado cómo hemos terminado hoy". Un mensaje que iba directo a sus compañeros, tratando de evitar que en el Clásico se repitan errores que pueden costar muy caros.
Además, al hablar de la remontada destacó que "es algo que sientes en el campo, no sé si llamarlo miedo. Ellos saben que juegan contra el Real Madrid, sientes que tras el primer gol que vamos a meter más. Con 2-2 tranquilizamos el partido”, aunque volvió a señalar que “si jugamos como en la segunda parte, el sábado va a ser mejor".