Eduardo Camavinga no jugará ante el Sevilla. El francés ha visto la cartulina amarilla en el choque ante el Rayo Vallecano y supone la quinta, que conlleva suspensión. Por tanto, Ancelotti ya no podrá contar con él.
El técnico italiano terminó bastante enfadado con su jugador, debido a que fue amonestado tras protestar. Estas acciones molestan bastante a Carletto, debido a que es algo en que siempre insiste a sus jugadores.
Por tanto, una vez que finalizó el choque no dudó en dirigirse al francés para achacarle su actitud en esa ocasión. Además, hay que tener en cuenta la gran cantidad de bajas que presentan los blancos, por los que hay que tener bastante cuidado con este tipo de cuestiones.
Ancelotti reconoció después en rueda de prensa que a Camavinga le espera una conversación. Forma elegante de decir que, al margen del enfado rápido en el túnel de vestuarios, hablarán sobre este asunto de vuelta a casa.
Al italiano no le gustan las amarillas por protestar. Menos cuando hasta él mismo reconoció ante los medios de comunicación que el árbitro había estado bien. Hoy no se pincha por eso, sino por un mal encuentro del equipo en general.