Llegó el clásico. El Real Madrid recibe al FC Barcelona en el Santiago Bernabéu para disputar el partido correspondiente a la jornada número 32 del campeonato nacional de liga. El conjunto blanco tiene una oportunidad para poner el broche de oro y sentenciar el título doméstico. En caso de ganar, la distancia sería de once puntos, siendo esta una diferencia prácticamente inalcanzable.
Este choque llega después de la eliminatoria ante el Manchester City. Los dos encuentros contra el conjunto inglés fueron muy exigentes, en especial el segundo. Por esta razón, Carlo Ancelotti saca este once: Lunin, Lucas Vázquez, Rüdiger, Tchouaméni, Camavinga, Kroos, Modric, Fede Valverde, Bellingham, Rodrygo y Vinicius.
Así pues, tan solo cuatro días después de lo vivido en el Etihad, las emociones y los sentimientos no paran en absoluto. En Valdebebas han insistido durante todos estos días de la importancia de conseguir una victoria hoy.
En busca del punto final
Los madridistas esperan que su equipo saque un resultado positivo para prácticamente cantar el alirón. Además, conviene resaltar que las semifinales frente al Bayern de Múnich están a la vuelta de la esquina, de modo que Ancelotti deseará tener encarrilada LaLiga para no estar tan exigido el próximo viernes en San Sebastián.
El míster de Reggiolo le ha recalcado a sus futbolistas que una derrota supondría dar vida al FC Barcelona. De hecho, les ha recordado que no pueden caer en la relajación, puesto que tal vez pudiera pasar algo similar al 0-4 de la campaña 2021/2022. Los culés se colocarían a tan solo cinco puntos y tendrían opciones de llevarse el campeonato. Esperemos que eso no suceda y confíemos en las ganas de los jugadores de poner la 'puntilla' final a Xavi y sus pupilos.