Hace más de seis meses que Kylian Mbappé dejó el PSG, pero Nasser Al-Khelaifi y el emir Tamim bin Hamad Al Thani continúan sin pagarle los 55 millones de euros que le deben al nacido en Bondy, lo que hace que el '9' de Real Madrid no pueda cerrar este capítulo de forma definitiva.
"Mi objetivo no es que se castigue al PSG. Si no, hace tiempo que habríamos ido a los tribunales por daños a la imagen o acoso psicológico. Podría haber emprendido acciones legales... Lo único que quiere Kylian Mbappé es que le paguen lo que le deben", expresó la abogada Delphine Verheyden en 'L'Équipe'.
Estas palabras de la representante de Kylian Mbappé deja claras las intenciones del parisino, pero también del PSG que no está por la labor de cumplir con lo acordado y firmano.
Romper las reglas del fútbol
Nasser Al-Khelaifi, quien está acostumbrado a hacer su voluntad, no quiere pagar al atacante del Real Madrid, lo que hace que el mundo del fútbol tenga el foco en esta historia, que esto puede generar un precedente muy peligroso.
"El PSG quiere escapar a las reglas del fútbol. Está dispuesto a derribar el sistema antes que cumplir con sus obligaciones. Si los órganos de gobierno no protegen los contratos y sus reglamentos, estamos enviando una fuerte señal que dice: 'Podéis pisotear a los jugadores'", explicó Delphine Verheyden.
Sin embargo, la abogada de Kylian Mbappé fue a más, ya que relató a detalle el plan de los representantes del club blanco, aunque sigue confiando en la que justicia llegue a esta historia.
"El PSG ha llevado a la LFP ante el Tribunal de Justicia de París, alegando que no es competente para obligar a un club a respetar los compromisos que ha contraído. Para participar en un campeonato profesional, el PSG debe aceptar las reglas. Pero al final dice que la Liga y la Federación no tienen poder sobre él como club. Esto se está convirtiendo en un problema mucho mayor que el caso de mi cliente. Podría hacer saltar por los aires todo el sistema. Por cierto, el club está en proceso de decir alto y claro a todos los demás clubes: “Dejad de pagar a vuestros jugadores, obligadles a ir al tribunal laboral». Pero se tarda un año y medio en obtener una decisión en primera instancia, dos años en apelación y otro tanto en casación. Todos habrán terminado su carrera antes de cobrar...", indicó Verheyden, quien es consciente de que a esta historia le quedan muchos episodios por vivir.